LAVAR MI MOCHILA: ¿A MANO O EN LAVADORA?

Muchas personas jamás se han parado a pensar en que las mochilas son un elemento o accesorio que se debe lavar, peor aún si se trata de la mochila que llevamos a todas partes, ponemos en el suelo e incluso dejamos en el vestidor del gimnasio donde cientos de personas sudando han dejado las suyas… incluso en ocasiones, no podríamos precisar si nuestra mochila está más sucia por dentro que por fuera.
Por eso, en trucosdelimpiezadelhogar.blogspot.com te vamos a contar lo sencillo que es el lavado y mantenimiento de las mochilas o morrales o bolsas.

MANTENER LIMPIA LAS MOCHILAS

Lo primero que queremos indicar es que hay unos consejos generales y simples para tener en cuenta a la hora de mantener la limpieza de nuestras mochilas:

1- Trate de nunca ponerla en el suelo, es el sitio donde más microbios puede recoger, en su lugar intente colgarla mientras pueda.

2- Desocúpela y limpie con un paño humedecido en agua (muy bien exprimido) y unas gotas de amoniaco de vez en cuando.

3- Cuando meta comida en ellas, trate de hacerlo en recipientes y todo muy bien cerrado para evitar que se rieguen las cosas dentro.

LAVAR EL MORRAL O MOCHILA A MANO

Lo primero que debe siempre es buscar las etiquetas de cuidados de su mochila, normalmente todas dicen que no se pueden mojar (incluso las de escalada), pero ya sabemos que los fabricantes prefieren “curarse en salud”.

Lo segundo que debe hacer es sacar todo lo que tenga ahí y ponerlo en una bolsa para poder volver a meterlo fácilmente.

Si tiene aspiradora a la mano, no dude en pasar una aspirada por el interior; si no tiene, póngala del revés y sacudirla vertiginosamente (antes de mojar porque ya sabemos que un poco de tierra, se puede convertir en barro a la hora de añadir agua, y manchar).

Quite todo lo que sea desmontable, para lavarlo aparte.

Con un paño humedecido con un poco de agua, trate de quitar la suciedad más visible (si la hay), frotando por los exteriores.

Ahora, en un cubo, en su bañera o en el lavabo, llene de agua y añada un detergente neutro (poco espumoso), también trate de que no sea ese oloroso detergente de lavar ropa, ya que después no se aguantará el olor de su mochila.

Sumerja la mochila y presione frecuentemente para que afloje la suciedad, tenga a mano un paño limpio para que –con la mochila sumergida- vaya frotando y haciendo poca espuma, mientras enjuaga en la misma agua.


NOTA: Evite el agua hirviendo o muy caliente, con agua fría puede quedar limpia su mochila.

Ahora, para enjuagar, si se puede ayudar de un poco de agua tibia, dejando pasar el agua por las diferentes partes de la mochila mientras aprisiona sin retorcer, repitiendo hasta que vea que no sale agua jabonosa.

Para secar, ponga una toalla seca debajo, su mochila en medio y una toalla encima, de forma horizontal y ejerza presión para que la humedad se transfiera a las toallas.

Póngala ahora si a secar (puede ser en el palo de la escoba), boca abajo y con todos sus compartimentos abiertos. Tenga en cuenta que tomará en todo caso, más de 2 días para estar completamente seca.

Para terminar, cuando esté seca, prepare todo lo que va a devolver a su mochila, y un paño con limpia cristales y vaya limpiando sin humedecer mucho, las cosas que se puedan limpiar como las tapas de las agendas, el estuche de las gafas, etc., y ya habrá terminado.

LAVAR LOS MORRALES A MÁQUINA

Nada del otro mundo el lavado a máquina de una mochila, solo unas cuantas indicaciones a tener en cuenta y poco más que decir:

• 1- Siga las indicaciones del lavado a mano, hasta el punto en que se va a mojar la mochila.


• 2- Métala en su lavadora de carga superior con las cremalleras cerradas y las correas bien recogidas (si tiene malla para lavado, mejor), la idea es que no se enrede. Si la lavadora es de carga frontal, no habrá problema en meterla con todo abierto.


• 3- Use el ciclo corto con agua fría y añada detergente líquido en el depósito de su lavadora, nunca directamente sobre la mochila (evite el detergente en polvo o las cápsulas).


• 4- Meta algo más en la lavadora como un par de calcetines o algo que pueda botar junto con la mochila.


• 5- Deje correr el ciclo y cuando comience a centrifugar (si el centrifugado de su lavadora es muy largo), sáquelo a los 5 minutos y ponga a secar como indicamos en el lavado a mano.


• 6- Ya está.

Y así terminamos la nota, muy sencilla y concreta, con la idea que le resulte útil y pueda hacerlo en casa.

Hasta la próxima!
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Jaci Marquez

"adorador" de las mascotas.
y amante de la limpieza

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